jueves, 10 de junio de 2010

SER PERIODISTA

Esta semana fue el día del periodista, no hice ninguna entrada al respecto porque no pude elegir quién podía representar hoy a esta profesión, pensé en Aliberti, Victor Hugo pero no sería justo por otros que también luchan contra los monopolios. Hoy muchos de los que ejercen el periodismo son mercenarios a disposición de los amos y señores de los medios de comunicación que manejan la información. Ellos, periodistas independientes, que dicen luchar por la libertad de expresión, son los que tienen el papel de fabricar y ocultar noticias según necesiten las empresas a quienes se han vendido, y poder así cerrar negociados como el de Papel Prensa. El mayor monopolio de la Argentina, Clarín, cuya dueña está acusada de haberse apropiado de dos bebes, hijos de desaparecidos en época de la dictadura, y pese a saber que los familiares los estaban buscando nunca se presentó a realizar exámenes de ADN, sólo ocultó, retaceó y usó todo su poder para difamar y entorpecer a los organismos que buscan la verdad y justicia. Su grupo maneja esta cantidad de medios:

http://www.paralavictoria.com.ar/imagenes/mapa_clarin.html

Elegí a Rodolfo Walsh; muchos de los que hoy piden por la libertad de expresión no podrían levantar la vista para mirarlo a los ojos.

Rodolfo J. Walsh nació en 1927 en la localidad de Choele-Choel, provincia de Río Negro. Fue escritor, periodista, traductor y asesor de colecciones. Su obra recorre especialmente el género policial, periodístico y testimonial, con celebradas obras como Operación Masacre y Quién mató a Rosendo. Walsh es para muchos el paradigmático producto de una tensión resuelta: la establecida entre el intelectual y la política, la ficción y el compromiso revolucionario. El 25 de marzo de 1977 un pelotón especializado emboscó a Rodolfo Walsh en calles de Buenos Aires con el objetivo de aprehenderlo vivo. Walsh, militante revolucionario, se resistió, hirió y fue herido a su vez de muerte. Su cuerpo nunca apareció. El día anterior había escrito lo que sería su última palabra pública: la Carta Abierta a la Junta Militar.

Texto extraído de http://www.literatura.org/Walsh/Walsh.html


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